Se realiza la presente narrativa apoyándonos en tres elementos básicos que menciona el historiador Pierre Nora, en relación a la historia, la memoria y el papel que debe jugar el historiador ante los acontecimientos. Para ello se considera el caso de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en el cual perdieron la vida 43 estudiantes a manos de grupos delincuenciales, apoyados por elementos policiacos que, en vez de defenderlos, los entregaron a Guerreros Unidos para su ejecución. Se intenta también desenmascarar la “verdad histórica” construida por el Estado mexicano con el fin de confundir a la ciudadanía y en defensa de personalidades de la política, policías locales y federales, así como del ejército. Esa “verdad” acordada bajo el liderazgo de Jesús Murillo Karam -hoy preso- se narra junto con el recorrido por la formación encomendada a las escuelas normales rurales y la creación de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos”.