Abstract
This article pretends to show the importance of the
process technology on the economic results of the
manufacturing industry companies, particularly on
the added value per worker. It is supported on a
survey made in a random stratified sample on 125
manufacturing firms located in Chihuahua City,
Mexico, in 2003 and 2004. It was identified the rela-
tions between the investment on technological
equipment and the technological degree of the firm
and between the last and the economic added
value. It was made a descriptive analysis of the cho-
sen variables and a linear regression analysis that
allows to probe the hypothesis showing that: (1) the
investments on administrative equipment is the
variable that has the higher weight (ß = 0.456,
P<0.01), on the determination of the technological
degree and (2) the administrative process technol-
ogy is the variable that has the higher weight (ß =
0.367, P<0.01), on the determination of the added
value per worker. This positive significative enchain-
ment between the investment on equipments for
the administrative process, the technological de-
gree of the process and the added value by worker,
suggest a positive feedback that contribute to the
firm growing and the consequents scale econo-
mies by the productivity increase.
Keywords: Investment on technology, process tech-
nology, administrative technologies, Technology of
Information and Communication (TIC), Economic
Added Value.
Importancia de la tecnología en
el valor agregado de empresas
manufactureras de la ciudad
de Chihuahua, México
Technology influence on the
added value of manufacturing companies
located in Chihuahua City, Mexico
JUAN OSCAR OLLIVIER FIERRO*
__________________________________
*Facultad de Contaduría y Administración, Universidad Autónoma de Chihuahua, Campus Universitario 2, Chihuahua,
Chih., México, (614) 442-0065, jollivier@uach.mx
Resumen
El presente artículo pretende poner de relieve la impor-
tancia que tiene la tecnología empleada en los procesos
sobre los resultados económicos en las empresas de la
industria manufacturera, particularmente en el valor agre-
gado por trabajador. Se realizó una encuesta a una mues-
tra aleatoria estratificada de 125 empresas de la indus-
tria manufacturera de la Ciudad de Chihuahua, tomada
en los años 2003 y 2004. Se determinaron las relaciones
que existen entre las inversiones en equipo y el nivel tec-
nológico en los procesos y entre este último y el valor agre-
gado económico en las empresas. Se hizo un análisis
descriptivo y de regresión lineal que permite la compro-
bación de las hipótesis al poner de relieve: (1) la inver-
sión en equipo administrativo es la variable de mayor peso
(ß = 0.456, P<0.01), en la determinación del nivel tecnoló-
gico del proceso y (2) la automatización de las funciones
administrativas es la variable de mayor peso (ß = 0.367,
P<0.01), en la determinación del valor agregado por tra-
bajador en la empresa. Estas relaciones positivas signi-
ficativas del encadenamiento entre las inversiones en
equipos para las tareas administrativas, la tecnología en
la automatización del proceso administrativo y el valor
agregado por trabajador, sugieren un círculo virtuoso que
contribuye al crecimiento de las empresas y a las conse-
cuentes economías de escala por el incremento de la pro-
ductividad.
Palabras clave: Inversión tecnológica, tecnología del pro-
ceso, tecnologías administrativas, Tecnologías de Informa-
ción y Comunicaciones (TIC), valor agregado económi-
co.
Economía y administración
Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 •
44
Introducción
E
s innegable el hecho de que la tecnología desempeña un papel de
cada vez mayor importancia en la vida en general, pero particular-
mente en las empresas, las cuales se ven sometidas, debido a la
apertura de los mercados, a una competencia cada vez mayor, con
sus consecuentes efectos sobre el desarrollo local (Berumen, 2006). Por
otra parte, se podría generalizar que las inversiones en tecnología deben
llevar a las empresas a obtener mejores resultados económicos, sin embar-
go, dadas las diferencias entre las diversas tecnologías que se emplean en
una empresa y sus efectos, se considera necesario cuantificar las relacio-
nes entre las diferentes variables económicas y las variables tecnológicas
del proceso. El problema que originó este trabajo es la falta de indicadores
que muestren dicha relación entre variables económicas y tecnológicas que
permitan, a través del análisis estadístico, establecer relaciones de causalidad
potenciales entre una y otras. Los indicadores financieros tradicionales que
relacionan inversiones con valor agregado son de tipo descriptivo y, por lo
mismo, no permiten establecer relaciones de causalidad.
El objetivo general de la presente investi-
gación fue el de analizar las relaciones estadís-
ticas entre las inversiones en las diversas tec-
nologías, los niveles tecnológicos alcanzados
en los procesos y los resultados económicos
obtenidos en las empresas del sector manu-
facturero, lo cual permitirá tener una mejor com-
prensión de las implicaciones de las inversio-
nes y sus posibles efectos en los niveles tec-
nológicos y los resultados económicos en las
unidades de producción. De este objetivo ge-
neral se derivaron los siguientes objetivos es-
pecíficos: (1) identificar y medir las principales
variables del encadenamiento económico-tec-
nológico de la empresa, como son las de inver-
sión en equipos, del nivel tecnológico del pro-
ceso y de valor agregado en las empresas ma-
nufactureras, y (2) analizar las relaciones exis-
tentes construyendo modelos predictivos de la
tecnología del proceso en función de las inver-
siones en equipamiento y del valor agregado por
trabajador en función de las diversas tecnolo-
gías del proceso en las empresas de dicha in-
dustria.
De esta forma, se espera que la informa-
ción resultante permita: (i) proporcionar infor-
mación a las empresas de la industria, en rela-
ción de la conveniencia de sus inversiones en
los diferentes rubros tecnológicos y los resulta-
dos económicos esperados; (ii) aportar elemen-
tos de juicio a las instituciones públicas y priva-
das involucradas con políticas orientadas al de-
sarrollo tecnológico de las empresas manufac-
tureras para lograr su crecimiento e impacto
sobre el desarrollo local, por la vía del incremen-
to de su competitividad, la cual puede verse a
través de la interacción entre tres factores: in-
cremento a la productividad, incremento a la in-
versión y el empleo (Ruiz, 2004), y (iii) contri-
buir a la comunidad científica con un enfoque
de investigación que relaciona variables econó-
micas con variables tecnológicas.
La definición más cercana del constructo
central desarrollado en el presente trabajo como
“tecnología del proceso” es la adoptada por
Cohen (2004), como las acciones empleadas
para transformar insumos en productos y sus
dos principales expresiones, la instrumental (del
inglés hard), orientada a la automatización de
los procesos, y la social u organizativa (del in-
glés soft), orientada a la organización del traba-
jo en las empresas. Desde el punto de vista del
marco teórico, las técnicas se enmarcan en una
teoría del desarrollo tecnológico y del progreso
económico como el nuevo marco de
paradigmas (Sanmartín, 1990). En el campo de
• Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 45
la teoría económica, se demostró la importancia
crucial de la tecnología en el crecimiento a largo
plazo de la economía de un país; sobre estos des-
cubrimientos se construyó la lógica actual de in-
vertir en tecnología para acumular ventajas com-
petitivas (Blanch, 2003, Thirlwall, 2003). Sin em-
bargo, la complejidad del problema reside en que
la tecnología es cambiante. Actualmente el para-
digma técnico-económico vigente en el mundo
son las tecnologías de información y comunica-
ciones (TIC), que han causado una verdadera re-
volución, cambiando las condiciones económi-
cas que la precedieron, clausurando algunas
opciones viables y abriendo otras (Pérez, 2005).
No obstante, la penetración en México de estas
tecnologías se encuentra rezagada en relación a
los países industrializados: el gasto en las TIC
representó sólo un 3.2% del PIB en el 2001, cuan-
do en los países industrializados se encontraba
en un rango de 2 a 3 veces este valor; en el 2003
se tenían sólo 98 computadoras por cada 1,000
habitantes, cuando en los países industrializados
se encontraban en un rango de 250 de 700 en
ese mismo año (INEGI, 2006). Sin embargo, a
nivel de Latinoamérica, México ha destacado por
las políticas industriales transversales, del tipo de
las TIC, que tienen impacto en el conjunto del sis-
tema económico (Peres, 2006). En el caso de la
industria manufacturera en México, es el sector
que más computadoras tiene, comparado con
otras industrias, los servicios y el comercio. Con-
siderando estos puntos y en congruencia con los
objetivos del presente estudio referente a las em-
presas de dicha industria manufacturera, se plan-
tean las siguientes hipótesis:
Hipótesis 1 (H1). Las diferentes inversiones en
equipo no tienen el mismo peso en la determi-
nación del nivel tecnológico del proceso de la
empresa.
Hipótesis 2 (H2). Las diferentes tecnologías
del proceso no tienen el mismo peso en la
determinación del valor agregado por tra-
bajador.
Materiales y métodos
Se realizó una encuesta a una muestra de em-
presas de la industria manufacturera la ciu-
dad de Chihuahua, México, que consideró los
siete ramos incluidos en esta industria (ali-
mentos, papel, maderas, metálicos, minera-
les, químicos y textil), en sus cuatro tamaños:
micros, pequeñas, medianas y grandes, mis-
mas que sumaron 624 empresas y que em-
plean a 71,000 trabajadores. El marco
muestral fue el listado de estas empresas en
el Sistema de Información Empresarial Mexi-
cano (SIEM) y las asociaciones empresaria-
les. Se calculó una muestra aleatoria
estratificada por el tamaño de la empresa
(Abad y Servín, 1993) –para un error de un
10% de la media y un nivel de confianza de un
95%– de 125 empresas (ver cuadro 1), den-
tro de las cuales se encontraron nueve em-
presas maquiladoras, siete grandes y dos me-
dianas.
Las principales variables fueron:
1. La inversión anual en capacitación por em-
pleado (Int_capa). Se calcula dividiendo el
monto total anual invertido en capacitación
entre el número de trabajadores.
2. La inversión en equipo administrativo
(Inv_Adm), que en su mayor parte son TIC.
Se calcula a precios de reposición.
3. La inversión en equipo productivo
(Inv_prod). Se calcula a precios de reposi-
ción.
4. Grado de automatización del proceso ad-
ministrativo (gap_admi). Se trata de un ín-
Cuadro 1. Distribución de las empresas de la muestra de la encuesta según ramo y tamaño.
Tamaño
Micro
Pequeña
Mediana
Grande
Todos
Alimentos
2
5
1
8
Madera
6
10
1
17
Metálicos
18
7
3
5
33
Minerales
10
1
11
Papel
8
7
3
1
19
Químico
3
6
3
3
15
Textil
12
8
1
1
22
Todos
59
44
12
10
125
Fuente: el autor.
Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 •
46
dice construido a partir de 12 reactivos
(Agresti, 1990), el cual se expresa como un
porcentaje del puntaje promedio.
5. Grado de automatización del proceso pro-
ductivo (gap_prod). Se trata de un índice
construido a partir de 5 reactivos, el cual se
expresa como un porcentaje del puntaje pro-
medio.
6. Nivel de empleo de las tecnologías
organizativas (tec_blan), las cuales se refie-
ren a las nuevas formas de organizar el tra-
bajo en la empresa. Se trata de un índice
construido con base en 8 reactivos, el cual
se expresa como un porcentaje del puntaje
promedio.
7. Nivel tecnológico del proceso de la empresa
(gtec_tot). Se trata de un índice construido
en base al promedio de los tres anteriores,
el cual se expresa igualmente como un por-
centaje. Esta tecnología del proceso difiere
del concepto de “la innovación” (que se re-
fiere sobre todo a los productos) y solo es
introducida al mercado en forma indirecta
(Corona, 1997).
8. Valor agregado (Val_agr). Se calcula suman-
do los montos anuales de la nómina y las
utilidades.
9. Valor agregado por empleado (int_vaag). Se
calcula dividiendo el valor agregado entre el
número de trabajadores, seleccionada como
variable dependiente por ser uno de los re-
sultados más representativos del buen des-
empeño económico de la empresa.
El instrumento consistió en un cuestiona-
rio formado básicamente por cuatro partes: las
tecnologías en relación al área administrativa,
al área productiva (del taller), las denominadas
organizativas o blandas, y las variables econó-
micas. En la construcción del índice del grado
de automatización del proceso administrativo
(Kerlinger, 2002) se consideró la automatización
(empleo de las TIC) para la elaboración de: co-
rrespondencia, contabilidad, nómina, órdenes
a proveedores, inventario, facturación, control
de clientes, porcentaje de computadoras conec-
tadas en red, manejo de bases de datos, exis-
tencia de una página de Internet de la empresa
y empleo del comercio electrónico. Para la
construcción del índice del grado de
automatización del proceso productivo se con-
sideró la automatización para: diseño de pro-
ductos, requerimientos de compra, manufac-
tura, pruebas y empaque. En la construcción
del índice del grado de empleo de las tecnolo-
gías organizativas se consideró el grado de in-
tensidad en el trabajo con las técnicas de: con-
trol o sistema de administración de la calidad,
trabajo en equipos, mejora continua, justo a
tiempo, manufactura esbelta, calidad total, cin-
co “S” y seis sigma.
El método propuesto para la prueba de hi-
pótesis consiste primeramente en la construc-
ción de dos modelos de regresión lineal: uno
con el nivel tecnológico como variable depen-
diente, en función de las diferentes inversio-
nes en equipo, y otro con el valor agregado
por trabajador como variable dependiente, en
función de las diversas tecnologías del proce-
so. En segundo lugar se hizo la comparación
de los diferentes valores de los coeficientes
estandarizados beta, que reflejan la influencia
de las diferentes variables predictoras sobre
la variable independiente en los modelos de
regresión. Este trabajo parte de dos supues-
tos: el primero es que la automatización en los
procesos administrativos y productivos y las
tecnologías organizativas forman en su con-
junto la tecnología en los procesos de produc-
ción; el segundo es que todas las empresas
poseen un cierto nivel tecnológico en sus pro-
cesos.
Resultados y discusión
Como parte del análisis descriptivo, en los cua-
dros 2, 3 y 4 se muestran los principales valo-
res de las variables seleccionadas.
En el cuadro 2 se muestran las inversio-
nes realizadas (a precio de reposición), las cua-
les permiten calcular que la inversión por traba-
jador en equipo administrativo es aproximada-
mente 54% superior en las empresas grandes
comparadas con las micro. Este resultado es
congruente con la relación positiva entre el ta-
maño de la organización y el empleo de las TIC
encontrado en las empresas de Turquía (Acar,
2005). Las inversiones realizadas en equipo del
proceso productivo (de taller) por trabajador son
aproximadamente 73% superiores en las em-
presas grandes comparadas con las micro. La
inversión anual en capacitación por trabajador
• Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 47
es aproximadamente 147% superior en las
empresas grandes comparadas con las micro
(Craig, 1996). En otro estudio sobre la misma
población se encontró que el valor del indica-
dor de la inversión en capacitación como un
porcentaje de la nómina para las empresas me-
dianas y grandes es de 2.2%, mientras que este
mismo valor para las empresas de clase mun-
dial es de 5% (Ollivier, 2005).
En el cuadro 3 se observa una relación di-
recta entre el grado de automatización del pro-
ceso administrativo y/o productivo y el tamaño
de la empresa, y una marcada desigualdad
entre en las empresas micro y las grandes
(aproximadamente tres veces). Estos resulta-
dos son congruentes con los encontrados en
Canadá por Dodgson en una encuesta realiza-
da en 4,200 establecimientos manufactureros
en el 2001, estudio donde se destaca que las
empresas grandes son líderes en la adopción
de herramientas de automatización (Pedroza y
Sánchez, 2005). Por otra parte, el hecho de que
la automatización del proceso productivo sea
mayor en las empresas medianas que en las
grandes se debe principalmente a que en es-
tas últimas predominan las maquiladoras, las
cuales no tienen altos grados de automatización
en sus procesos productivos por ser empre-
sas de mano de obra intensiva. Igualmente se
observa una relación directa entre el grado de
empleo de las tecnologías organizativas (soft)
y el tamaño de la empresa, lo cual sugiere que
las empresas grandes han desarrollado estra-
tegias orientadas hacia el uso intensivo de es-
tas tecnologías organizativas, debido al bene-
ficio que les aportan en relación a los costos
relativos de las mismas (Gaynor, 1996) y tam-
bién al hecho de que en su mayor parte son
técnicas relativamente recientes, que son pri-
meramente adoptadas por las grandes empre-
sas. En cuanto a la variable Nivel tecnológico
del proceso, que representa una síntesis de
las anteriores, se constata la desigualdad que
existe en los niveles tecnológicos, principal-
mente entre el grupo de las empresas micro-
pequeñas y el de las medianas-grandes, para
Valor agregado anual
Valor agregado por trabajador
anual
Micro
431,608
73,751
Cuadro 4. Valor agregado anual total y por trabajador según tamaño de empresa (en pesos).
Pequeña
1,601,622
87,860
Mediana
18,348,333
136,207
Grande
11,007,783
143,565
Total
11,649,553
90,235
Fuente: el autor.
Automatización del proceso
administrativo
Automatización del proceso
productivo
Empleo de las tecnologías
organizativas
Nivel tecnológico del proceso
de la empresa
Micro
25,82
21,78
20,45
22,12
Cuadro 3. Valores de las diversas tecnologías por tamaño de empresa
(el valor de las variables se expresa sobre base porcentual).
Pequeña
42,39
26,48
27,60
31,02
Mediana
64,35
51,25
56,42
57,11
Grande
84,03
57,50
68,54
69,65
Total
40,01
29,12
30,27
32,42
Micro
33,851
372,155
9,084
Cuadro 2. Principales inversiones por tamaño de empresa (en pesos).
Equipo administrativo
Equipo de taller
Capacitación al personal anual
Pequeña
66,695
565,518
23,950
Mediana
1,492,667
30,694,957
209,166
Grande
6,057,180
74,244,700
2,578,000
Total
677,091
9,261,012
260,266
Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 •
48
los cuales la diferencia de medias entre estos
grupos es estadísticamente significativa
(t=10.12, P<0.01).
En la figura 1 se observa una relación di-
recta entre esta variable, Nivel tecnológico del
proceso y tamaño de la empresa, cuyo coefi-
ciente de correlación es de 0.64 (P<0.01).
En el cuadro 4 se muestra el valor agrega-
do por trabajador (que en ocasiones es em-
pleado como un indicador de productividad),
el cual es creciente con el tamaño de la em-
presa, al punto en que en las grandes es de
dos veces el de las micro, lo cual es consisten-
te con el fenómeno de las economías de esca-
la. Similar al caso anterior, entre el grupo de
las empresas micro-pequeñas y el de las me-
dianas-grandes la diferencia de medias de esta
variable es estadísticamente significativa
(t=5.1, P<0.01).
En cuanto al análisis de regresión lineal,
el cuadro 5 muestra en el modelo, a través de
los valores de los coeficientes estandarizados
beta y los de significancia (y los valores de “t”),
que la variable predictora más importante que
explica las variaciones de la variable depen-
diente, nivel tecnológico del proceso, es la in-
versión en equipo administrativo, con un coefi-
ciente beta superior en más de dos veces al
de las inversiones en equipos de taller. Esta
situación, sumada al hecho de que el costo re-
lativo de los equipos administrativos es menor
en comparación a los del taller, hace que sean
bastante más rentables estas inversiones. Se
observa que la contribución de las dos varia-
bles predictoras (coeficiente de determinación,
R2=0.35) a la explicación de la variación del
nivel tecnológico del proceso es de 35%, lo cual
Predictora
Automatización del proceso
administrativo
Automatización del proceso
productivo
Empleo de las tecnologías
organizativas
Constante
Dependiente
Valor agregado
anual por
trabajador
(en pesos)
R2
0.31
Cuadro 6. Regresión lineal considerando como variable dependiente el valor agregado por trabajador
y variables predictoras las variables tecnológicas.
Coefici. B
(millón $)
766.96
338.76
237.2
42,872
Coeficiente
ß
0.367
0.167
0.103
t
3.61
1.67
1.05
5.55
Significancia
estadística
.000
.000
.098
.297
.000
Fuente: el autor.
Predictora
Inversión en equipo
administrativo
Inversión en equipo
de taller
Constante
Dependiente
Nivel tecnológico
del proceso
(%)
R2
0.35
Cuadro 5. Regresión lineal considerando como variable dependiente el nivel tecnológico del proceso
y como variables predictoras las inversiones en equipo administrativo y de taller.
Coefici. B
(millón $)
4.019
0.098
29
Coeficiente
ß
0.456
0.187
t
4.79
1.96
18.6
Significancia
estadística
.000
.000
.052
.000
Figura 1. Nivel tecnológico del proceso
según el tamaño de la empresa.
Fuente: el autor.
• Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 49
sugiere la relación causal de las inversiones,
particularmente en equipo administrativo, so-
bre el nivel tecnológico del proceso de la em-
presa.
El modelo de regresión lineal del cuadro
6 muestra, a través de los valores de los co-
eficientes beta (estandarizados) y los de
significancia, que la variable predictora más
importante que explica las variaciones de la
variable dependiente, valor agregado anual
por trabajador, es la automatización del pro-
ceso administrativo, con un coeficiente beta
superior en más de dos veces al de la
automatización del proceso productivo en el
taller. De la misma forma, el coeficiente de de-
terminación (R2=0.31) sugiere una relación
causal de las tecnologías, particularmente la
del proceso administrativo, sobre el valor agre-
gado por trabajador de la empresa. Este re-
sultado es congruente con los encontrados en
esta misma industria a nivel nacional; en una
muestra de 1,818 empresas (por medio de un
análisis factorial y conglomerados) se identifi-
có que el grupo de empresas con mayor pro-
ductividad y margen de utilidad era también
el que tenía la mayor introducción de nuevas
tecnologías en su operación (Domínguez y
Brown, 2004). Igualmente, estos resultados
son congruentes con la asociación positiva
entre la innovación del proceso y el desem-
peño del negocio reportada por David
Smallbone et al (2003) en empresas inglesas
e irlandesas.
Con los resultados anteriores, se proce-
de a la prueba de las hipótesis.
Hipótesis 1 (H1). Las diferentes inversiones
en equipo no tienen el mismo peso en la
determinación del nivel tecnológico del pro-
ceso de la empresa (ß1 y ß2). Tal como se
puede observar en el análisis de regresión
del cuadro 5, los valores de los coeficien-
tes estandarizados beta (ß1 y ß2), corres-
pondientes a las diferentes inversiones, no
tienen el mismo valor (ß1=0.456 con P<0.01
y ß2=0.187 con P<0.06), lo cual significa
que las diferentes inversiones no tienen el
mismo peso en la determinación del nivel
tecnológico (lo cual también se comprue-
ba en los diferentes valores de “t”), por lo
que la H1 se acepta.
Hipótesis 2 (H2). Las diferentes tecnologías del
proceso no tienen el mismo peso en la de-
terminación del valor agregado por trabaja-
dor (ß1 , ß2 y ß3). Tal como se puede observar
en el análisis de regresión del cuadro 6, los
valores de los coeficientes estandarizados
beta (ß1 , ß2 y ß3), correspondientes a las di-
ferentes tecnologías, no tienen el mismo va-
lor (ß1=0.367 con P<0.01, ß
2=0.167 con
P<0.1 y ß3=0.103 con P<0.3), lo cual signifi-
ca que las diferentes tecnologías del proce-
so no tienen el mismo peso en la determina-
ción del valor agregado por trabajador (lo cual
también se comprueba en los diferentes va-
lores de “t”), por lo que la H2 se acepta.
Desde una perspectiva de conjunto, se pue-
de decir que un factor importante que determi-
na la productividad –considerada como la efi-
ciencia en el uso de los recursos para transfor-
mar los insumos en productos– es la tecnolo-
gía, misma que puede explicar el vínculo entre
las inversiones (entradas) y el valor agregado
en las empresas (salidas). Por otra parte, el
hecho de que un mayor valor agregado –que
generalmente conlleva a mayores utilidades–
pueda generar a su vez los recursos para reali-
zar mayores inversiones, hace que se cierre un
círculo virtuoso: inversiones en equipo-nivel
tecnológico del proceso-valor agregado-inver-
siones en equipo, tal como se muestra en la
relación circular de la figura 2, la cual sugiere,
como relación causal del crecimiento, la retroa-
limentación del valor agregado en las inversio-
nes en tecnología, principalmente TIC, contri-
buyendo de esta forma al fenómeno de las eco-
nomías de escala, por el incremento en su pro-
ductividad.
En cuanto a las diferentes fases por las que
debe pasar el proceso de adquisición y domi-
nio de las tecnologías de información, se han
establecido modelos de crecimiento como el de
Figura 2. Círculo virtuoso entre inversiones,
tecnología del proceso y valor agregado.
Fuente: el autor.
Vol. I, No. 1 • Enero-Abril 2007 •
50
Tan, el cual establece cinco niveles: integra-
ción funcional, integración entre funciones, in-
tegración del proceso, rediseño del proceso de
negocios y redefinición del alcance del nego-
cio (Stroeken, 2001). No obstante que estos
resultados ponderan las tecnologías adminis-
trativas como las más influyentes en los resul-
tados económicos, con el fin de reducir los tiem-
pos de respuesta en la fabricación, se reco-
mienda integrar los sistemas administrativos
con los productivos.
Conclusiones
Del objetivo central del presente trabajo, que fue
el análisis de la influencia de la tecnología en el
valor agregado en las empresas de la industria
manufacturera a través de la medición de las
relaciones entre las variables de inversión, de
tecnología del proceso y del valor agregado por
trabajador, empleando la técnica de regresión
lineal, se puede concluir:
1. Las inversiones que tienen mayor in-
fluencia (más rentables) para incremen-
tar el nivel tecnológico del proceso de la
empresa son las inversiones en equipo
para automatizar las tareas administrati-
vas (H1).
2. La automatización de las tareas admi-
nistrativas es el factor que tiene la mayor
influencia en la determinación del valor
agregado por trabajador (H2).
En cuanto a sus principales implicaciones,
la medición estadística de la magnitud de las
relaciones proporciona información valiosa que
permite la toma decisiones informada, en parti-
cular las orientadas a incrementar los niveles
tecnológicos de los procesos en sus diferentes
componentes para incrementar el valor agre-
gado de la empresa y su capacidad de inver-
sión, cerrando de esta forma el círculo virtuo-
so.
Como conclusión general se puede decir
que este estudio muestra la bondad de las in-
versiones en tecnología en las empresas ma-
nufactureras, particularmente en los procesos
administrativos –mismos que forman parte de
las denominadas tecnologías de información y
comunicaciones (TIC)–, como un soporte im-
portante para su crecimiento, lo cual es con-
gruente con las recomendaciones de las orga-
nizaciones internacionales (OCDE, 1996,
UNCTAD, 2003).
Agradecimientos
El presente trabajo de investigación fue posi-
ble gracias al apoyo de la Secretaría de Edu-
cación Pública a través del Programa de Mejo-
ramiento del Profesorado (PROMEP), al cual
agradezco la confianza depositada en mi per-
sona.
Igualmente agradezco a las empresas el
soporte proporcionado por haber dedicado el
tiempo para el llenado de los cuestionarios, y
a los alumnos y maestros de la Facultad de
Contaduría y Administración de la Universidad
Autónoma de Chihuahua por su apoyo para la
realización de la presente investigación, espe-
rando que sea de utilidad a la comunidad
chihuahuense y al país.
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Recibido: Abril 24, 2006/Aceptado: Septiembre 8, 2006
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