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• Vol. X, Núm. 3 • Septiembre-Diciembre 2016 •
En palabras de Martínez (2007): cuando se
concibe la realidad tomando en cuenta que los
códigos fundamentales de cada cultura son los que,
por una historicidad profunda rigen su lenguaje, sus
esquemas perceptivos, sus cambios, sus técnicas, sus
valores y la jerarquía de sus prácticas. Cuando no
interesa tanto lo que son las cosas en sí, sino lo que
son para uno (significado). Cuando se brinda
importancia al pensamiento que responde siempre al
mundo-de-vida, integral, de una comunidad particular,
en un momento y tiempo históricos determinados.
Cuando se interesa por el modo propio y peculiar
que tiene un grupo humano de asignar significados a
las cosas y a los eventos, es decir, en su capacidad y
forma de simbolizar la realidad. Cuando se centra la
atención en el hombre como sujeto, y no solo como
objeto de estudio, es decir, en el hombre como persona,
con conciencia y libertad, irreductible a cualquier otra
cosa. Es entonces cuando algunas nociones como
éstas, sobre una concepción ampliada de la realidad
escapan a la metodología cuantitativa y es ahí,
cuando se vuelve necesario echar mano de la
metodología cualitativa como una alternativa de
investigación.
Para continuar enfocando la atención en la
naturaleza de la realidad compleja, se retoma a
Minayo (2002), quien realiza un análisis de cinco
aspectos característicos del objeto de estudio de las
ciencias sociales que lo vuelve un desafío para la
investigación. Estos aspectos son:
Su carácter histórico. Existe un presente
marcado por el pasado y proyectado para el futuro,
eso le imprime otras cualidades: su provisoriedad,
dinamismo y especificidad, en un momento en lo que
está dado y lo que está siendo construido.
Posee conciencia histórica. Esta característica
viene en consecuencia de la anterior y se refiere a
que los seres humanos, los grupos y las sociedades
le dan un significado a sus acciones, a sus
construcciones, de tal forma que las estructuras
sociales no son nada más que acciones objetivadas.
Identidad entre sujeto y objeto. Se investiga
seres humanos que, por razones culturales, de clase,
fase etárea o por cualquier otro motivo, tienen un
sustrato común de identidad con el investigador,
haciéndolos solidariamente involucrados y
comprometidos; cita a Lévi-Strauss (1975): en una
ciencia donde el observador es de la misma naturaleza
que el objeto observado, él mismo se convierte en
parte de su observación. El observador no solo no
está aislado del fenómeno que estudia, sino que forma
parte de él. El fenómeno lo afecta, y él, a su vez,
influye en el fenómeno.
Ideológico. Este objeto es extrínseca e
intrínsecamente ideológico, de manera que es
comprometido. Lo que se percibe y su significado
dependerán de nuestra formación previa, de nuestras
expectativas teóricas actuales, de nuestros valores,
actitudes, creencias, necesidades, intereses, miedos,
ideales. Trasmite intereses y visiones del mundo
históricamente construidas.
Esencialmente cualitativo. "La realidad social
es el propio dinamismo de la vida individual y colectiva
con todas las riquezas de significados que de ella
desbordan. Esa misma realidad es más rica que
cualquier teoría, cualquier pensamiento y cualquier
discurso que podamos elaborar sobre ella" (p 15).
Por lo tanto, los códigos que puedan hacerse sobre
ellas son incapaces de abarcarlas y contenerlas, pues
son recortados y reducidos por naturaleza
fragmentaria. Las ciencias sociales poseen
instrumentos y teorías capaces de hacer una
aproximación a la suntuosidad que es la vida de los
seres humanos en sociedades, para lo cual aborda el
conjunto de expresiones humanas constantes en las
estructuras, en los procesos, en los sujetos, en los
significados y en las representaciones.
Ante esta forma de concebir la realidad, de
construir los objetos de estudio, se vuelve necesario
lo que Martínez (2007) defiende: un modelo
dialéctico, respaldado por toda la orientación
postpositivista actual, que considera el conocimiento
como el resultado de una dialéctica entre el sujeto y
el objeto o fenómeno de estudio. Nuevos métodos
que lleven a la estructura última de los temas vitales
desafiantes, que los capten como son vividos. La
matriz epistémica sería el trasfondo existencial y
vivencial, el mundo-de-vida y lo que origina y rige el
modo general de conocer.
Forma relacional, sistémica, estructural,
gestáltica, humanista. Valora las cosas, los eventos y
las personas por lo que son en sí, pero hace énfasis
en la red de relaciones en que nacen y se desarrollan;
LUZ VERÓNICA BERUMEN-BURCIAGA Y PATRICIA KUERTEN-ROCHA: La investigación cualitativa desde la perspectiva
epistemológica